"Yo tenía una granja en África, al pie de las colinas de Ngong". La frase se ha convertido en una de las más reconocidas de la historia de la literatura, pero en realidad alcanzó la fama en el fingido acento danés de Meryl Streep, en los créditos iniciales de la película basada en la vida y obra de Karen Blixen. Bien, esta es la granja, y las colinas de Ngong sirven de telón de fondo. ¿Se necesita algo más para un auténtico enclave histórico?

Aunque la vieja granja fue reemplazada hace largo tiempo, y dónde no, por un lujoso barrio residencial, la casa que de 1917 a 1931 perteneció a la escritora danesa Karen Blixen se las ha ingeniado para permanecer en pie a través de todos los avatares históricos experimentados por Kenya en el siglo XX.

La casa está situada a unos diez kilómetros del centro de Nairobi, en el corazón del distrito de Karen. Aunque el nombre del barrio debería dejar claro sus orígenes, realmente no es así. Una versión afirma que fue el tío de la autora, el propietario de la corporación familiar, quien bautizó la colonia en honor a su propia hija Karen. Dado que Blixen tenía tantos nombres --nacida Karen Christenze Dinesen, baronesa consorte Karen von Blixen-Finecke, Isak Dinesen como uno de sus varios seudónimos, y conocida por sus amigos no como Karen, sino como Tania--, la toponimia del distrito no es un asunto evidente. Pero a quién le importa; todo el mundo prefiere creer que el área entera rinde tributo a su memoria.

El museo debe su misma existencia al clásico de Sydney Pollack 'Memorias de África' (1985). Tras la marcha de Blixen de Kenya, la casa permaneció en manos privadas hasta que fue adquirida por el gobierno danés, que lo donó a Kenya como regalo para celebrar la independencia del país en 1963. Cuando se rodó la película, el edificio se empleaba como residencia anexa a una facultad cercana. Los Museos Nacionales de Kenya compraron el inmueble y abrieron el museo en 1986.

De inmediato, el museo se convirtió en un santuario, no solo para conmemorar la figura de la escritora, sino para celebrar la propia película. Además de algunos objetos y muebles pertenecientes a la auténtica Blixen, el museo acoge algunas piezas empleadas por los actores. Quienes busquen rememorar la película reconocerán fácilmente el ambiente, ya que las secuencias de exteriores fueron rodadas alrededor de la casa, incluyendo la veranda desde la cual Blixen/Streep contemplaba el perfil en forma de nudillos de las cercanas colinas de Ngong mientras esperaba a su amante, el aristócrata y cazador Denys Finch Hatton, quien para la posteridad siempre llevará el rostro de Robert Redford. En cambio, se escogió un emplazamiento diferente para los interiores, ya que las estancias de la casa resultaban penumbrosas y angostas.

El museo comprende dos construcciones, la residencia principal y un bloque separado que alberga la cocina. Las visitas guiadas, que son obligatorias, conducen a los visitantes a través de la casa, que parece rotundamente pequeña y modesta para una aristócrata. Esta puede ser la razón por la que ciertos visitantes terminan algo decepcionados con el museo, pero recuerda que, aunque este es sobre todo un lugar para mitómanos y entusiastas, no solo fue la morada de una autora inmortal que quedó a las puertas de ganar el premio Nobel; también es uno de los escasos testimonios supervivientes del Nairobi colonial, de los cuales ni siquiera los falsos han perdurado: el escenario construido para la película y que recreaba la ciudad a principios del siglo XX fue abandonado y destruido tras el rodaje.

Existe aún una sorpresa oculta que pasa inadvertida para muchos visitantes. En el lado más alejado del jardín, una senda se abre paso a través del bosque circundante. El camino conduce hasta una antigua y oxidada máquina de café, de la que se cuenta que es la original que quedó destruida por el fuego poniendo fin a la aventura granjera de Blixen. Si en realidad es la misma máquina, o si la retratada en la película fue fabricada siguiendo el modelo de esta vieja reliquia, poco importa; 'se non è vero, è ben trovato'.

El museo abre todos los días de 9.30 de la mañana a 6 de la tarde. El acceso a los terrenos es gratuito, pero hay que pagar para visitar la casa. No se permite tomar fotografías ni vídeos en el interior. El jardín también está disponible para la celebración de eventos privados o corporativos.

Más información: web oficial del Museo Karen Blixen

De acuerdo; uno no viaja a Kenya para ver museos. Pero el Museo Nacional de Nairobi, situado en Museum Hill a poca distancia del centro, ofrece una excelente oportunidad a los visitantes primerizos de sumergirse en una panorámica del país que están a punto de conocer. El museo es toda Kenya de un vistazo: prehistoria, historia, cultura, geografía, naturaleza, arte y pueblos, todo bajo un solo techo.

El museo en su ubicación actual data de 1930, bajo el dominio colonial, pero en realidad la idea de un emplazamiento permanente para acoger colecciones de naturaleza fue promovida veinte años antes por un grupo de naturalistas. Antes de erigirse la construcción en Museum Hill se ensayaron dos enclaves diferentes, en los lugares hoy ocupados por la infame Nyayo House y el Hotel Nairobi Serena.

Las colecciones del museo son hoy inmensas, pero las principales atracciones continúan siendo las réplicas de fósiles que presentan a África oriental como la 'cuna de la humanidad', junto con el modelo a tamaño natural de 'Ahmed', el elefante más famoso de Kenya, un espécimen con colosales colmillos que vivió en el Parque Nacional de Marsabit y que fue protegido por un sistema de vigilancia las 24 horas del día en virtud de un decreto del antiguo presidente Jomo Kenyatta.

Con el último cambio de siglo, se hizo patente que las instalaciones del museo se habían quedado obsoletas y en modo alguno representaban la rica herencia natural, cultural e histórica de Kenya. Así, las puertas del museo se cerraron en 2005 para una extensa renovación y se reabrieron en 2008 con una imagen más fresca y atractiva, incluyendo una oferta de tiendas, restaurantes e instalaciones para eventos. Los jardines botánicos y el sendero de naturaleza completan la visita.

El museo abre todos los días de 8.30 a 5.30 de la tarde.

Más información: web oficial del Museo Nacional de Nairobi

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